

Me habéis preguntado mucho sobre el caldo de huesos, tanto por sus beneficios como por su receta. Os dejo este post con todo explicado! A mi me encanta durante todos los meses del año.
BENEFICIOS:
1. Alivia el síndrome del intestino permeable: el colágeno actúa como un bálsamo calmante que cura y sella el revestimiento de los intestinos, evitando así otras dolencias de carácter autoinmune o neurológico.
2. Un gran aliado de nuestra piel: esta sustancia proteica ayuda también a prevenir y corregir las arrugas, así como a favorecer la elasticidad y firmeza de la piel. Un poder que se extiende a otras partes del cuerpo como el cabello, las uñas, los tendones o los ligamentos.
3. Bueno para la artritis y el dolor muscular: el caldo de huesos contiene sulfatos de glucosamina, condroitina y otros compuestos procedentes del cartílago, capaces de reducir el dolor que provoca la artritis.
4. Favorece la desintoxicación: hoy en día, el ser humano está expuesto a una gran cantidad de ingredientes artificiales, productos químicos o pesticidas que pueden dañar gravemente al organismo. Para complementar la desintoxicación natural del mismo, el caldo de huesos ayuda al sistema digestivo y al hígado a expulsar los desechos y eliminar toxinas.
5. Ese dicho popular que un buen caldo es lo mejor para combatir catarros, gripes y resfriados no es un cuento de abuelas, el caldo de huesos inhibe la migración de neutrófilos (situación que se da ante una infección y que provoca inflamación en el cuerpo) mejorando así los síntomas de gripes y catarros reforzando el sistema inmunológico.
INGREDIENTES
1 carcasa de pollo eco y/o de gallina con el cuello.
1 hueso de la rodilla de ternera.
Puedes poner otros huesos como por ejemplo un hueso de jamón, huesos de la columna, y / o un pie de cerdo, en total unos 750g-1000g de huesos. Cuantos más, mejor.
5 ajos con piel aplastados con un cuchillo.
1 hoja de laurel.
2 c / s de vinagre de manzana sin pasteurizar.
Agua filtrada.
Verduras opcionales: apio, hinojo, puerro, cebolla, nabo, etc.
PASO A PASO
Pon los huesos en la olla donde harás el caldo, añade el vinagre, los ajos y el laurel. Pon el agua filtrada y deja reposar 30 minutos.
Pasado este tiempo enciende el fuego al máximo, pon la olla y espera hasta que arranque a hervir. Una vez esté hirviendo, baja el fuego al mínimo y dejar al menos 3 horas.
Pasados 2 horas, puedes poner las verduras que hayas escogido, troceadas y dejar que siga hirviendo una hora más.
Cuando el caldo ya esté cocinado y todavía caliente, cuélalo con un colador de malla fina y déjalo enfriar a temperatura ambiente.
¡Ya está!. En la nevera aguanta una semana.